sábado, 29 de enero de 2011

Cabalgando hacia el Norte


Repicaban los cascos de plata sobre el pavimento cristalino. Los pétalos de las rosas de aire flotaban, como copos de nieve en el invierno del alma. Como un rayo de luz, como una gota de sangre, cabalgaba hacia la negrura de la noche.

La Reina Roja había tomado el campo blanco, y reía, reía en la oscuridad espejada de terciopelo y estrellas.

Cantaba su historia de amor, pero su sonrisa nos hablaba de sueños rotos. La Reina Roja florecía en el sueño del día, cuando nadie la podía ver. Era una rosa helada, ardiente en la nieve gélida, fundía su alma con el frío, preservando la sangre para que no se ennegreciera.

Latía, latía sin dejar de avanzar, enloquecida por lo que la corroía las entrañas. Su cabello flotaba en la brisa invernal en su travesía olvidada. Corría para no morir.

Ya había perdido la cabeza.

Frente a ella, las Luces del Norte irisaban el cielo. Las espinas se iban clavando en su corazón, derribando el castillo de naipes que era su cordura, y lentamente se deshacía en lágrimas heladas.

¿Quién era ella? ¿Por qué sentía aquél calor en su alma fría? Se había prometido ser de hielo. Pero no podía. Latía su pecho, latía su ser.

No, no, no. No podía ser cierto. No podía estar viva.



jueves, 27 de enero de 2011

Soy un alma en flor


¡Hola mundo!

Soy un alma en flor.

Soy una mariposa

en un huracán

revoloteando

un sueño azucarado.

¡Hola amor!

Vengo a darte un beso,

un caramelo suave

debajo de una sábana

de seda.

Si es que te quiero,

y estaré aqui.

Endulzando tu vida

sólo para vivir

en la luz de tu sonrisa.

Y que sepas que nada

me dentendrá

en mi empeño.

Si la vida me reta...

...¡Aceptaré el reto!



miércoles, 26 de enero de 2011

Arroyo dulce


Hoy me he levantado liviana.

Como una brisa fresca de primavera

como las rosas que se abren al sol matinal.

Hoy el día es frío y limpio

al igual que un arroyo de montaña

imitando el gorjeo de un jilguero

en libertad.

Etérea y fresca

hoy soy agua.

No me atraparás

pero jugaré con tu pelo

cada vez que te abrace.

Gélida risa

que despierta a la mañana.

Frío dulce, muy dulce.

Como un helado de vainilla

espolvoreado de canela.

Porque a veces

ser, y no ser,

preservarte, esperar

es mas agradable

que destruirte en un mar

de atormentada pasión.



lunes, 24 de enero de 2011

Camino al Fin del Mundo, Etapas 7 y 8 (Resumen)

23 y 24 de Agosto del 2010

Grandas de Salime- Fonsagrada- O Cadavo.


Finalmente, pude beberme la sidra. Salimos de Asturias por el Puerto del Acebo, que no se hizo pesado en absoluto y entramos en Galicia. El camarero del bar O Acebo nos regaló un pincho de lacón con tomate. El camino hasta Fonsagrada se nos hizo eterrrrno. Por desgracia, el albergue estaba más adelante, en Padrón, lo que significó dos kilómetros más.

El albergue es pequeño, pero muy acogedor y cómodo, y las hospitaleras eran dos voluntarias de Protección Civil. Me pasé el rato durmiendo. Hoy llovía, y había niebla, así que salimos tarde. El camino ha sido muy agradable, parte en carretera, parte en camino. Mientras duró el camino subimos a Montouto, cerca de los dólmenes. El recorrido estaba cubierto por la niebla, por un bosque en silencio... Hasta que nos zampamos un bocadillo, y salió el sol. Llegamos tarde al albergue, y casi no llegamos a coger cama. Y aquí estamos, en O Cadavo, agotados y destrozados. ¿Qué tal será mañana..?

domingo, 23 de enero de 2011

Camino al Fin del Mundo, Etapa 6

22/08/2010

Etapa 6 Berducedo-Grandas de Sálime

Finalmente hemos bajado en autobús. Paco todavía tiene algo chunga la rodilla, así que sin problema. Ha sido buena idea hacerlo, dado que la bajada parecía realmente terrible. Ahora estamos en Grandas, un pueblo muy acogedor con una curiosa historia: el museo etnográfico que abrió un hombre llamado Pepe el Ferreiro ha sido "expropiado" por el ayuntamiento. Así que, cuando lleguemos a Valencia, nos uniremos a su causa.

El hospitalero del albergue es muy amable y, por lo visto hemos acabado ya los tramos de montaña dura. Ya sólo nos queda el Puerto del Acebo, que no será tan duro como el Palo.

Mañana pasaremos a Galicia, algo que me apena en parte, pero bueno, el Camino es el Camino, y lleva a donde lleva. De hoy no pasa que tome una sidrina. Estoy empezando a experimentar el terrible fenómeno del "turigrino", turistas que hacen el camino... en autobuses organizados. Menuda cara que tienen. Sólo me falta ver peregrinos en tacones. Los llevan en bus, los sueltan en una etapa, caminan un rato y los recogen de nuevo. Y encima, pedirán que les sellen la credencial y recogerán la Compostela, no te jode...

También están los que yo llamo los "deportistas". Parece que hagan una carrera, y no lo es, es un aprendizaje. Y, sobretodo, esto sirve para conocer pueblos, gentes, usos y costumbres. Y a eso vine yo. A conocer.

martes, 18 de enero de 2011

Lloraré por ti.

Lloraré por ti
cuando tu estés dormido
cuando no mires a mi pozo
cuando no estés aquí.

Lloraré por ti
siempre que te duela algo
siempre que te hagan daño,
si alguien te hace sufrir.

Lloraré por ti
si la luna ya no brilla,
si mi vida no es tuya,
si me dejas morir.

Lloraré por ti.

...Pero no dejaré que me veas llorar.

viernes, 14 de enero de 2011

Luces del Norte

Rueda la Rueda de Plata
sobre mi cabeza
marcando el tic-tac
del reloj eterno
como el engranaje perfecto
de un Relojero Desconocido.

Sopla Boreas, cubriéndome
de cristales blancos
escondiendo el fuego de mi alma
silenciando el aullido rojo
de mi corazón,
y en una sonrisa me duermo,
fría, eterna, incorrupta.

No quiero dejarlo escapar,
dejar que arda en mis manos,
por si desaparece y me destruye.
Por si acaba pudriéndose de pena.

Así que lo preservaré,
blanco y puro,
helado en el frío del secreto.
En el silencio de mis sueños plácidos,
en el misterio de la Noche Ártica.

Dormiré, fría e incorpórea,
latiendo de amor por dentro,
mi sueño helado.
Hasta que me despierten
las Luces del Norte.

martes, 11 de enero de 2011

...¿Quien...eres...tú?


...¿Dónde vas, Alicia?

Preguntó el señor Oruga, a la niña que corría a través de los rosales.

Alicia corría, corría sin detenerse, como la Reina Roja le dijo, tras el Conejo Blanco.



Pero éste era más veloz que Alicia. Todo era tan rojo como la Reina, todo rojo... Rojo su pelo, roja su ropa,
rojas las rosas.

Bajando por la escalera en espiral, hacia un mundo desconocido. ¿Quién la seguiría hacia la madriguera? Nadie.


En el fondo, en lo más profundo, estaba sola en un sueño, perdida en un ajedrez eterno, donde el jaque a la Reina
se pagaba con la cabeza. Ni la Liebre le hacía reír, ni el Dodo la hacía soñar.

Sólo seguía al Conejo, corriendo, corriendo, como el peón de la Reina.

Y en un estanque en forma de corazón se vio reflejada. ¡Quien era la Reina, sino ella!

Qué engañada estaba.

Pintó todas las rosas rojas, pintó el agua de sangre. El País de las Maravillas era suyo.

¡Ay, Alicia! ¿Cuál fue tu camino?


¿Quién eres tú?- Preguntó el señor Oruga, que ya no reconocía a quien tenía frente a sí.

...Y el espejo no habló.


domingo, 9 de enero de 2011

La Flecha Roja



La bruja, tendida en la roca, dormía el sueño de las estrellas. Había visto el destino en un pozo, y pedido su deseo.

Se había enfrentado a todas sus hermanas. Era la más bella, la más poderosa, la más fría. La peor de las brujas.

Pero aquello le había roto el gran muro oscuro que la protegía. El golpe definitivo, rojo como la sangre, negro como la noche.

Un igual. Un contrario.

Pero no era suyo.

La bruja escrutaba las estrellas y la luna con los ojos cerrados. Los labios rojos, como su cabello. Las cejas oscuras,

como pintadas con tinta china y un pincel de pelo suave. El rostro pálido salpicado de puntos negros, como si fuera el negativo del cielo reflejado en su faz.



Y el alto penacho negro de la flecha sobresaliendo entre sus pechos, con el virote rojo hacia el cielo, clavándola a la piedra dura. Su coraza, rota, estaba esparcida a su alrededor, en pedazos de negro cristal. Una coraza que no cubría de los golpes físicos, sino de las miradas del resto.

Y así, vulnerable e indefensa, no le podía decir al arquero "Eres mío" sino... "Eres libre".

Sus ojos lloraban lágrimas de sangre, así como su pecho.

Y así, su alma fue Cuervo, y voló.



Desde entonces, la bruja llora sobre la roca con los gemidos de la Tierra. Su voz son los graznidos de los cuervos, su cuerpo está cubierto de hiedra. Su sangre es el agua de los manantiales, su aliento el Viento del Norte.

Y en su abrazo acoge al caído, y espera pacientemente la llegada del cazador que atravesó su pecho. No en clamor de venganza, sino para otorgarle el don del descanso.

Hay quien dice que si algún día un guerrero halla clavada la flecha roja en la roca de la montaña, y la honra,

tendrá el favor de la Diosa del Luto y el Llanto.

...Y que nunca, nunca, nunca le faltará el reposo.


viernes, 7 de enero de 2011

Grité

Grité tu nombre a un acantilado,

con el mar al frente

Grité lo mucho que te amo, para que el viento

se llevase mis palabras.


sábado, 1 de enero de 2011

...And a Happy New Year

2011 está aquí, y ha venido para quedarse. Jodeeer, otro año más. Cada vez pasan más deprisa.

Llevo unas ojeras y una resaca dignas de ser recordadas (u olvidadas, no sé realmente qué quiero hacer con ellas). Pero que son épicas, eso no me lo quita nadie.

Año Nuevo siempre me ha parecido un dia de sentimientos encontrados. El 31 de diciembre es uno de esos días que no son, como la Nochebuena, o la noche de Reyes, o el 19 de Marzo. Un dia sin dia, que siempre es igual. Un dia al que llegas y es como si estuvieras es un bucle. Cambias tú, no el día. Creo que si te esfuerzas, puedes verte a ti mismo en los años anteriores.

El concierto de Año Nuevo... Perfecto. Un montón de valses vieneses. Lo mejor para mi resaca.

Y...bueno. Ese es el planning de hoy. Pasar la resaca con el Concierto de Año Nuevo, la mascletà de la Alameda, la comida con la familia y despues a casa de Sonia, con los amigos.

Es un buen plan para empezar el año, ¿no?