miércoles, 12 de mayo de 2010

Alma de frambuesa

Tocaste la fina membrana de mi alma
cuando aún estaba desnuda, blanda, fresca.
La herida se endureció, dejando una cicatriz eterna.

Tocaste mi alma, color frambuesa,
doliente niña que pierde la inocencia.
La piedra la preserva.

Aún duele. Aún pesa.

--------------

Cayó una maldición entre nosotros.
Yo jamás podré tenerte.
Tú a mi tampoco.

Morna.

No hay comentarios:

Publicar un comentario